"Versailles", es una serie de coproducción franco canadiense que narra la más que fascinante historia de quizás uno de los palacios más fascinantes y majestuosos de la época barroca europea. Ahora podemos ver la construcción de este palacio, en la serie "Versailles" creada por Simon Mirren y David Wolstencroft, estrenada en 2015 y que cuenta con tres temporadas. Esta producción narra, los años de juventud del famoso monarca Luis XIV (George Blagden), que a sus 28 años de edad, se encuentra en su máximo esplendor, no solo a nivel personal, sino también a nivel profesional, es decir como rey, algo que va a demostrar con la construcción y ampliación de su palacio favorito Versalles. Con motivo de esta construcción y lo que supondrá, el rey ordena el traslado de su corte a palacio haciéndonos partícipes de las numerosas dificultades que rodean a la edificación y la relación del monarca con su entorno, en especial con su hermano Felipe I.
Será a partir de 1668, cuando este palacio deje de ser un coto de caza, para convertirse en un palacio fastuoso con jardines de ensueño, pero también un lugar lleno de traiciones, en el que el monarca vigilaba bien de cerca a aquellos que había acogido bajo su ala. La serie no solo narra, la construcción del palacio, sino también las historias de todos aquellos que se encuentran en sus paredes, líos amorosos, infidelidad, muertes y traiciones en la corte francesa. El desarrollo de la construcción, la riqueza de los escenarios, el preciso diseño de las diversas estancias palaciegas juegan muy a favor para nuestra inclusión histórica viéndose reflejado el gran presupuesto que la televisión francesa destinó a su realización. Pero, a parte de todo lo ya contado, hay un gran problema en está serie, su reparto, que aunque lo intenta una y otra vez, no consigue enganchar al público y mucho menos cautivar, sus interpretaciones son frías, poco creíbles y en muchas ocasiones algo aburridas. Su protagonista principal George Blagden (visto en Vikingos), crea un Luis demasiado endeble, provocando que Alexander Vlahos le sobrepase en el papel de Felipe de Orleans.
Otra cosa buena que tiene la serie es sin duda alguna, su manera de retratar al rey por concentrar y controlar todo el poder dentro de palacio creando allí su gran núcleo de poder supremo así como sus luces y sus sombras. Pero quizá deja de lado el rigor histórico en determinado aspectos, especialmente los relacionados con las batallas y las dificultades por las que tuvo que atravesar Francia en algunas de ellas, creando cierto recelo a los conocedores de los hechos de ese periodo. Sin duda, "Versailles", es una serie altamente recomendable, para los amantes de los dramas históricos.
Lo peor: El resto de su reparto.