viernes, 1 de abril de 2022

Expediente Warren: Obligado por el demonio

 



Título original: The Conjuring: The Devil Made Me Do It
Titulo: Expediente Warren: Obligado por el demonio
Año: 2021
Duración: 112 min
PaísEstados Unidos
Dirección: Michael Chaves
Guion: David Johnson. Historia: James Wan, David Johnson
Música: Joseph Bishara
Fotografía: Michael Burgess
Reparto: Vera Farmiga, Patrick Wilson, Ruairi O'Connor, Sarah Catherine Hook, Julian Hilliard, John Noble, Eugenie Bondurant, Shannon Kook, Ronnie Gene Blevins, Keith Arthur Bolden, Steve Coulter, Vince Pisani, Ingrid Bisu, Andrea Andrade, Ashley LeConte Campbell, Sterling Jerins, Paul Wilson, Charlene Amoia, Mitchell Hoog, Megan Brown, Davis Osborne, Nicholas Massouh
Productora: Atomic Monster, New Line Cinema, The Safran Company
Género: Terror. Thriller. Intriga | Sobrenatural. Brujería. Posesiones / Exorcismos. Basado en hechos reales. Años 80. Secuela
Sinopsis: Ambientada en los años 80. Ed y Lorraine Warren deberán afrontar un nuevo caso que se presenta con un hombre, Arne Cheyne Johnson, que es acusado de asesinato tras haber sido poseído por un demonio.


CRITICA


Año 2013, la mente retorcida y macabra del talentoso James Wan, aquel capaz de traernos productos como “Saw”, consiguió resurgir de entre las cenizas al género de terror más comercial con la notable y querida “The Conjuring”. Puro terror fantasmagórico de casas malditas donde gracias a un buen trabajo de dirección, predomina una ambientación oscura, tenebrosa y una tensión que te deja descansar solo por momentos. Tal fue el éxito por el público y la crítica que pronto Warner Bros se puso manos a la obra en explotar el mundo de los Warren con un sinfín de productos como “The Conjuring 2: The Enfield Poltergeist” un secuela bien lograda y parecida a su predecesora, “Annabelle” una muy dudosa trilógia de la muñeca más creepy del momento, otro producto escaso de talento y mal logrado de la monja más fea con “The Nun”, y “The Curse of La Llorona” otro aún peor producto de la leyenda mejicana de la Llorona.

Bien, hecho ya el dinero y sin importar tanto la calidad, llegamos a día de hoy con la tercera entrega de los Warren, tras sus dos precuelas que sin lugar a dudas son lo mejor de esta saga de mucho susto y pocas nueces. Regresamos a las aventuras fantasmagóricas del matrimonio de demonólogos de Ed y Lorraine Warren, en otro caso ¿real? donde un hombre acusado de asesinato alegó en su defensa posesión demoniaca para cometer el crimen, empezando así una carrera a contrarreloj donde nuestros protagonistas deberán demostrar la existencia del diablo en los tribunales.

Abandonando las casas encantadas, “The Conjuring: The Devil Made Me Do It” se arma de valor y se adentra en terreno desconocido convirtiéndose en un thriller sobrenatural de detectives, donde el terror y la marca de la casa pasan a un segundo plano y que, por desgracia, todo atisbo de horror se siente forzado y escasamente efectivo. El guion y Michael Chaves, director de ésta y “La Llorona”, la que tiene el dudoso honor de ser la peor película de la saga; se centran tanto, o tan poco, en el apartado de investigación que hasta olvidan el porqué de la misma, llegando a verse sin ningún afecto, ni llegar a tener ningún tipo de importancia ni relevancia (para el público) si los Warren consiguen su cometido.Entonces, ¿que nos queda de una película de “The Conjunring” si no tiene ni una pizca de tensión, falla en ambientación terrorífica, y el thriller que nos presenta se degusta sin interés ni curiosidad? Muy fácil, los Warren. Patrick Wilson y Vera Farmiga siguen tan hipnóticos y escalofriantes como de costumbre y, aún que no consiguen mantener la cinta, por lo menos nos dan una excusa para seguir viéndola y no abandonar la sala.

Para no ser tan cruel, cabe destacar la escena inicial de la película, ya que es sin ninguna discusión la única parte de metraje salvable y donde podemos saborear un poco de mal rollo. Tanto se distancia del resto de la cinta que uno puede llegar a pensar que esa misma escena ésta dirigida por otra mano y mente más talentosa (¿Wan, eras tú?).En fin, a miedo de parecer repetitivo, esta tercera entrega cambia a una fórmula atrevida que de haber salido bien podría haber salido ganando y mucho. Por lastima se queda solo en un intento pobre en el que, por no saber dirigir un thriller en condiciones y no mantener un mínimo nivel de tensión, se pierde la esencia terrorífica de las únicas películas que si funcionaban en esta saga. Quizá en otro proyecto hubiese funcionado mejor.

Lo mejor: Vera Farmiga y Patrick Wilson.
Lo peor:   La historia es aburrida, y alejada del caso real.


NOTA: 1/5