viernes, 10 de junio de 2022

Heridas abiertas

 



Título original: Sharp Objects
Titulo: Heridas abiertas
Año: 2018
Duración: 60 minutos
País: Estados Unidos
Dirección: Marti Noxon (Creador), Jean-Marc Vallée
Guion: Marti Noxon, Scott Brown, Ariella Blejer, Dawn Kamoche, Vince Calandra, Alex Metcalf. Novela: Gillian Flynn
Fotografía: Yves Bélanger, Ronald Plante
Reparto: Amy Adams, Patricia Clarkson, Chris Messina, Eliza Scanlen, Taylor John Smith, Will Chase, Jackson Hurst, Catherine Carlen, Madison Davenport, Sydney Sweeney, Henry Czerny, Elizabeth Perkins, Dylan Schombing, Wes Robertson, Robert Artz, Gunnar Koehler, Sophia Lillis, Matt Craven, Miguel Sandoval, Lulu Wilson, David Sullivan, Emily Yancy, Beth Broderick, Barbara Eve Harris
Productora: Blumhouse Productions | Adaptaciones de Gillian Flynn
Género: Serie de TV. Thriller. Drama | Miniserie de TV. Thriller psicológico. Asesinos en serie. Familia. Drama sureño
Sinopsis: Tras pasar un breve tiempo en un hospital psiquiátrico, la periodista Camille Preaker regresa a su pequeña ciudad natal para cubrir los asesinatos de dos chicas adolescentes. Durante años, Camille apenas ha hablado con Adora Crellin, su neurótica e hipocondríaca madre, que vive con su marido y con su hija Amma, hermanastra de Camille, una joven a la que apenas conoce. Instalada en su antiguo dormitorio en la mansión victoriana de su familia, Camille pronto se identifica con las jóvenes víctimas. Atrapada por sus propios demonios, debe desentrañar el rompecabezas psicológico de su propio pasado si quiere obtener una historia que escribir acerca de los crímenes.


CRITICA


"Heridas abiertas" no es una serie apta para todo el mundo, de ahí su encanto. Amy Adams, Patricia Clarkson y Eliza Scanlen, excelentes en su trabajo como actrices, conforman el centro neurálgico de ese pueblo paranoico y asfixiante que es Wind Cup. Ellas, cada una en su ámbito, representan lo peor del ser humano: Adora es la hipocresía y la demencia hecha persona, Camille es el dolor más absoluto y Amma es la bipolaridad, tan angelical como macabra.

Las tres están envueltas en un entorno tan siniestro como ellas: el policía Vickery, que inspira cualquier cosa menos confianza, Jackie, la (ex) amiga de Adora, un personaje tan estrambótico y frívolo que nunca sabes cuales son sus verdaderas intenciones, y Alan, el padre de Amma y marido de Adora, un ser que pulula por la casa, escucha música y claudica ante su mujer. Además de ellos, aunque sin tanta importancia, también están las -abusonas- ex compañeras de colegio de Camille o las amigas de su madre, todas igual de zumbadas que el resto. En medio de todo esto, el detective Richard Willis y Frank Curry, el jefe de Camille, suponen un aire fresco en ese ambiente tan viciado. Para Camille, el primero es el antídoto de su dolor y de su miedo a desnudarse física y mentalmente y el segundo es la voz de la protección y el cariño, el único que ha conocido.

La edición es un acierto. Otro más. Escenas y escenas que suponen recuerdos atosigadores, recuerdos imborrables, mientras que el silencio en gran parte del metraje nos da la sensación de soledad que sufre Camille. De una manera sutil pero muy inteligente, desde el principio nos muestran a Camille a cara descubierta, con esos primeros planos, en contraposición de su madre, a la que en los primeros episodios aparece como un animal esquivo, al que no ves ni mucho ni bien. Los últimos capítulos son brutales, en los que se nos va cayendo el pañuelo de los ojos. Podías imaginarte que Adora escondía algún secreto e incluso podías dudar en algunas cosas de Amma, pero jamás lo que realmente es, aunque realmente todo estaba ahí, sólo tenías que fijarte. Durante el capítulo final se produce una cena familiar en la que madre y hija realizan un intercambio de miradas terrorífico, y la escena final consiguió dejarme boquiabierto y con los brazos en alto, absolutamente asombrado, así como las escenas post créditos. Qué mal rollito. Muy pocas películas y series han conseguido impactarme tanto. Si "Feud" y "Big Little Lies" fueron las series de 2017, puedo concluir sin temor a equivocarme, a pesar de estar a mitad de año, que "Heridas abiertas" es la serie de 2018.


Lo mejor: Amy Adams.
Lo peor:   El climax, de la serie llega demasiado rápido.


NOTA: 4/5